CARTA A UN AMIGO.

Hoy quiero desnudar por entero mi mente para hacerte el único regalo que puedo, para entregarte de corazón todas estas letras, tal vez no sepas nada cierto de mí, ni yo nada verdadero sobre ti, pero si sé, que te aprecio y te estimo al igual que se hace con ese ser que se conoce de toda una vida.

Hoy desnudo mi alma para decirte algo muy cierto que nace de mi corazón y es que a pesar de no conocerte, te aprecio, te estimo, te quiero...
Sí, te quiero, como se quiere al hermano, al padre, a esa persona que siempre está en los buenos y en las malos ratos de la vida, pero no me preguntes el porqué, no sabría contestarte, tan sólo puedo decirte que en mi corazón te siento tan cercano y confía tanto en ti, aunque aún no sé el porqué.

Hoy quiero desnudar mi alma para decirte que mis palabras tan sólo llevan sinceridad, que mi mayor deseo es que siempre consigas ser feliz, que jamás te apartes de mi lado, contigo me siento tan bien... me arropas con tu mano dulce y serena.

Pero si algún día decidieras marchar sin decir adiós, me dolería el alma, me he acostumbrado tanto a tenerte a mi lado... quizás al otro lado de esta pantalla no me sientas, pero yo siento cada alegría tuya, cada pena, cada lágrima, cada nostalgia... te siento como piensas, como sientes tú también, cómo se te abre el corazón de tristezas y alegrías, como recuerdas, porque somos tan distintos y tan iguales a la vez...

Al otro lado de este cristal te tengo siempre, más no me importa, para mí es tenerte a la orilla misma de mi alma y con eso yo... ya me conformo, no pido nada más, aunque si te pido, esas letras que se hacen mías de tus manos, cuando las escribes aquí... así no me siento tan sola.

Hoy desnudo el alma y no me avergüenza decirte que te quiero... que te aprecio... que te hecho tanto de menos cuando no estás...